He estado reflexionando y a mis 31 años, he sido un hombre apasionado por la diversión y la buena vida. Prácticamente desde muy joven he pasado alejado de mi familia. Ninguna relación estable hace bastante tiempo (tampoco es que me interese demasiado tener una). A está edad uno se da cuenta que tanto uno ha madurado. Hay momentos que siento, que llevo una vida vacía, debido principalmente a que aún no he llegado a encontrar una estabilidad como persona, es decir, sigo siendo un "inmaduro de mierda".
Me he puesto a pensar que cuando tenía 18 o 19 años, uno de mis ideales era cambiar el mundo, creo que todos de muy jóvenes hemos pensado eso. Y ahora, nos vemos envueltos en el mismo mundo que queríamos cambiar, buscando mejores sueldos, más dinero para nuestro bolsillos, mejores cargos, etc. y si nos desviamos de esta búsqueda tenemos un profundo miedo, de cómo afrontar la vida.
Ayer por la noche estaba viendo una película que no recuerdo exactamente el nombre pero que me quedo con una frase que me impacto y quiero compartir:
"Nuestro tiempo es limitado, no hay que desperdiciarlo viviendo la vida de alguien más"
Por lo que, tal vez este año que viene no cumpla todo lo quiero y no llegue a obtener esa estabilidad como persona y que tal vez siga desperdiciando mi vida viviendo la vida de alguien más, pero he decidido que este año es el año del cambio y que un simple chispazo traiga grandes cosas a futuro.
Felices fiestas para todos.
